Una calle de la India en plena Barcelona
Si la semana pasada hablábamos de una de las vermuterías más top de la ciudad, hoy traemos otra propuesta que está causando auténtico furor, especialmente entre el sector foodie de instagram.
Y no solo por ser un local bonito y acogedor decorado con las ilustraciones increíbles de Brusco, sino porque su gastronomía bien se merece el reconocimiento.
Masala 73 ha sabido reconvertir su food truck, después de quedarle demasiado pequeño, a un curry bar de comida india callejera con mucha categoría. Con una carta breve pero intensa que cambia según la estación del año, Masala 73 conquista corazones al mismo ritmo frenético que lo haría en una calle de Mumbai.
Al mando del chef Kuldeep Singh se preparan platos de la cocina india artesanal cuidando todos los detalles, utilizando ingredientes ecológicos, acompañándolos de cervezas indias y naans recién hechos artesanalmente con masa madre.
Pasen y vean, empieza el baile.
Empezamos con el tradicional pan naan que no puede faltar, un pan redondo y plano hecho con harina de trigo en el horno tandoor.
Continuamos con la bomba mumbai, un entrante que nos encantó.
Se trata de una bomba de patata hecha al estilo de la Barceloneta (un guiño que nos gustó mucho), con garbanzos y guisantes acompañada de salsa brava y mayonesa de curry.
Seguimos con el picantón, pero al estilo Masala claro. Un pollito picantón entero marinado en especias tandoori masala servido con chutney de menta, cilantro y lima.
Muy rico aunque de todo lo que comimos, quizás lo que menos sorprendió.
El curry es un esencial, apostamos por el de cordero ecológico con denominación de origen Xisqueta de Cal Tomàs, muy indio tú!
Al estilo Gosht Madras según su carta y esto no se qué quiere decir pero os aseguro que estaba buenísimo, guisado con especies, jugo de cordero, iogurt, hinojo y menta, tan riqui martin con su picante y todo.
Acompañamos la jugada con el típico arroz basmati para las salsas, que además tiene un proyecto solidario vinculado y por cada plato de arroz se donan 50 céntimos a la ONG sonrisas de Bombay, para la educación en pre escolar, un detalle genial.
Y terminamos con el postre, una idea deliciosa de zanahoria y pistacho.
Crema de zanahoria estilo gajarela con pastel de zanahoria y helado de pistacho de Delacrem, muy auténtico de la india no creo que sea pero buenísimo está un rato. Hacía mucho que no me comía el helado de Delacrem de pistacho di Bronte (mi favoriiiito) y es una auténtica perdición.
Un sitio que os recomiendo visitar ya que a pesar de tener una carta cortita merece mucho la pena y, además, ya están preparando su próxima propuesta.
Como detalle no quiero irme sin comentar que nos equivocamos a la hora de pedir el vino, no nos dimos cuenta justo cuando se estaba descorchando de que era blanco en vez de tinto pero ya no nos lo quisieron cambiar... Lo entiendo, fue culpa nuestra, aunque hubiese sido de agradecer, un fallo lo tiene cualquiera y al final una botella se puede servir a copas. A mi no me importó porque además soy más de blancos, pero se de uno que estuvo remugando toda la comida jajaja y no volvería solo por eso.
- ¿Porqué hay que ir? Porque la india está muy lejos, ¿no?
- Moraleja ¿quién dice que no se puede fusionar cualquier cocina?
- Precio aproximado esta comida con vino rondó los 60 euros en total para dos personas
- Ubicación
MASALA 73
Muntaner 152
Barcelona
937 978 702
